¿Cómo nos enferma el estrés?

Última actualización: 20, julio, 2022 -

Estres

El estrés es una reacción natural del cuerpo a un cambio y no se puede evitar por completo. En cantidades normales, el estrés es útil: nos hace reaccionar (luchar o huir) ante el peligro. Los problemas surgen cuando el estrés se vuelve constante y las pausas entre episodios estresantes desaparecen por completo.

Los efectos del estrés crónico a largo plazo sobre la salud son múltiples y no desdeñables. Esto se debe a que el estrés afecta al cuerpo de pies a cabeza, provocando dolores de cabeza , problemas digestivos, hipertensión arterial, insomnio, problemas dermatológicos, obesidad, depresión… Al mismo tiempo, al descontrolarse, el estrés puede empeorar condiciones preexistentes. Es fundamental, por tanto, encontrar los métodos adecuados, incluso recurriendo a ayuda especializada, para gestionar eficazmente el estrés y evitar la acumulación de efectos negativos sobre la salud.

¿Quieres saber cómo nos enferma el estrés? A continuación, te lo decimos:

Antojos de alimentos

Varios estudios han relacionado el cortisol, una hormona secretada en abundancia en momentos de estrés, con el antojo de alimentos grasos y dulces. ¿Explicación? Los expertos creen que esta hormona se une a los receptores cerebrales responsables de controlar la ingesta de alimentos. Y el efecto es aún más pronunciado, al parecer, cuanto mayor es el peso corporal.

Acumulación de tejido adiposo

El aumento de peso, otra consecuencia indeseable del estrés, no solo se debe a la dieta caótica, sino también al efecto del cortisol sobre los depósitos de grasa. Más concretamente, parece que esta hormona aumenta la cantidad de tejido adiposo que se acumula en el organismo. Además, aumenta el tamaño de las células grasas. Más peligroso aún es el hecho de que este fenómeno afecta en gran medida a la grasa abdominal, el tipo más peligroso para la salud.

Ataque al corazón

La correlación exacta entre el estrés y el ataque al corazón aún no se ha dilucidado. Sin embargo, cada vez más evidencia sugiere que el estrés tiene un impacto abrumador en la salud del corazón, lo que aumenta en gran medida el riesgo de tal evento. Un estudio de 200.000 empleados europeos encontró que las personas con trabajos estresantes tienen un 23% más de riesgo de sufrir un ataque al corazón que aquellos que no enfrentan estrés en el trabajo.

Alto nivel de azúcar en la sangre

En momentos de estrés, se activa la respuesta de «lucha o huida», en cuyo caso los latidos del corazón y la respiración se aceleran, el estómago se obstruye y el nivel glucémico aumenta. Esta situación es especialmente peligrosa para las personas que ya padecen diabetes o se encuentran en etapa de prediabetes, con intolerancia a la glucosa.

Desordenes digestivos

Quemaduras, calambres, diarrea, todos son problemas digestivos que pueden ocurrir en momentos de estrés. Más problemático es que trastornos como el síndrome del intestino irritable, la enfermedad celíaca y las úlceras, aunque no se desencadenan por el estrés, se agravan por la exposición prolongada al mismo.

Problemas dermatológicos

El acné parece agravarse por el estrés, siendo los principales «culpables» en las mujeres las hormonas androgénicas (masculinas) cuyo nivel aumenta durante los períodos exigentes. Pero todo estrés puede provocar otros problemas dermatológicos, desde eccemas hasta rosácea, psoriasis, alopecia (pérdida de cabello), vitíligo, tricotilomanía (caída incontrolable del cabello), entre otras enfermedades.

Dejar un comentario